jueves, 24 de mayo de 2012

Piercing eróticos ¿morbosos?

Desde hace mucho tiempo siempre ha habido una moda con lo que respecta a la belleza y el cuerpo humano. Algunas tribus de Africa tienen y han tenido la costumbre de estirarse el cuello o los labios. O las chinas buscan unos pies cuanto más pequeños mejor. Y hoy en nuestra sociedad occidental se llevan los tatuajes y los piercings. Pero hoy vamos a hablar de los piercings eróticos, y es que en la actualidad hay gustos de todo tipo.

A pesar del dolor, del dolor al placer o el placer del dolor (también: para todos los gustos…) seguimos colocándonos bolas y perlas de titanio bajo la piel y atravesando nuestros cuerpos con pequeñas lanzas y puntas afiladas de acero quirúrgico. Existen muchos modelos para hacer padecer a nuestra anatomía, aretes para cejas, labios, lenguas, también en pezones, clítoris, glandes, ganchos de suspensión. Las perforaciones en distintas zonas erógenas no deja de parecer sadomasoquismo aunque luego colguemos del agujero flores, mariposas o strass. ¿Es que la perversión nos vuelve más eróticos?

En resumen, se diría que el piercing conduce al placer en el propio cuerpo, a nuevas sensaciones eróticas a partir del roce del metal sobre las zonas más sensibles, la fantasía de mirar y ser mirado… pero existe un camino de regreso de la fantasía a la realidad y es el arte. Body Piercing, ¿es un arte? ¿es una práctica morbosa?

2 comentarios:

  1. Pienso que cada opcion que tengas a mano ayuda para la satisfaccion y la estimulacion cada quien con su morbo..

    ResponderEliminar